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15 Consejos de Educación Ambiental para Niños

Niña subida en un arbol

La educación es la base del mundo en el que vivimos, y esto incluye la educación ambiental.

Educar a los niños con valores medioambientales y que sepan sobre la situación actual de los recursos naturales es crucial para vincularlos con el futuro de la naturaleza y fomentar su participación activa en la conservación del medio ambiente.

Una gran cantidad de colegios en todo el mundo incluyen cátedras donde se ofrecen conocimientos teóricos y prácticos sobre el impacto de la acción humana en la naturaleza.

“La educación ambiental es fundamental para que los niños tomen conciencia de la necesidad de cuidar el medioambiente”

Zys

Pero ¿Cómo educar a los niños sobre este tema desde casa?

Niños en la naturaleza aprencdiendo a cuidarla
Niños aprendiendo a cuidar la naturaleza

A continuación, encontrarás algunos consejos y rutinas que puedes poner en práctica dentro del hogar para sensibilizar a los niños sobre el agotamiento de los recursos naturales, el cambio climático, la reducción de la biodiversidad y otras problemáticas medioambientales.

Además, podrán aprender a reducir su huella de carbono de una manera entretenida e interesante.

Mejores prácticas de educación ambiental para niños

Al igual que con cualquier acción que deseas enseñar a tu hijo, la conexión entre los niños y la naturaleza es exitosa cuando avanzamos poco a poco, con actividades sencillas y, especialmente, cuando damos ejemplo.

Ellos se fijan mucho en el comportamiento y las costumbres de sus padres y profesores.

De la misma forma en la que nuestros hijos pueden aprender fácilmente comportamientos inapropiados, pueden aprender también sobre conciencia ambiental.

Aquí encontrarás las prácticas de educación ambiental más sencillas y cotidianas que puedes aplicar para enseñarles a tus pequeños a cuidar el planeta:

1. Lleva a los niños que vean y vivan la naturaleza

Los niños aprenderán a cuidar la naturaleza cuando empiecen a disfrutar de ella.

Además, las actividades al aire libre tienen el valor agregado de mejorar la salud de los niños, especialmente a aquellos que sufren de ansiedad, depresión y obesidad.

Existen multitud de actividades que se pueden hacer en la naturaleza, andar, correr, montar en bici, visitar entornos naturales etc.

También podemos organizar actividades de este tipo con grupos de amigos o compañeros de colegio y de esta forma logramos una excelente forma de concienciar a los niños y niñas sobre la necesidad de proteger la naturaleza.

La Tierra es nuestro hogar y lo tienen que saber.

2. Reutiliza tanto como puedas

Enseña a tus pequeños a usar recipientes adecuados para tirar la basura.

Pequeños detalles como preparar una merienda que no genere desperdicios pueden representar una gran lección para los niños, especialmente si no se utiliza plástico.

Todos los objetos pueden tener una segunda vida, por lo que podemos reutilizarlos para darles otro uso.

Una excelente alternativa es conseguir un recipiente y cubiertos reutilizables de su personaje o dibujo animado favorito, además de usar servilletas y pañuelos de tela en lugar de papel.

Lava bien y esteriliza los frascos de gelatina, yogures o mermelada y reutilízalos como vasos.

Además, encárgate de transformar los recipientes de plástico que no utilices en contenedores de abono orgánico si tienes un lugar adecuado en tu hogar.

3. Incentiva a tu hijo a beber agua

No hay mejor manera de valorar un recurso natural que comprendiendo su importancia.

Enseñarle a tu hijo sobre lo valiosa que es el agua para su salud le permitirá valorar más este recurso y pensarlo dos veces antes de malgastarlo.

4. Cuidar el agua

Acompaña a tu hijo a cepillarse los dientes y enséñale a cerrar el grifo cuando lo esté haciendo.

Tirar de la cadena haciendo uso de la media carga es una buena práctica y sencilla de realizar.

Además, muéstrale cómo regar las plantas sin malgastar agua, preferiblemente de noche en verano.

Es importante ducharse en lugar de bañarse, porque se reduce mucho el consumo de agua y acostúmbralos a poner un recipiente para recoger el agua que sale del grifo mientras se calienta, para darle un uso posterior.

También puedes comprar un reloj de ducha para controlar el tiempo, le va a gustar.

El agua es un recurso limitado, tres de cada diez personas en el mundo no tienen acceso a agua potable en el hogar.

5. Ahorra energía

Antes de enseñarle a un niño a apagar la luz cuando salga de su habitación, hazlo tu primero en cada estancia de la casa. Predica con el ejemplo.

Lo mismo ocurre con la televisión si nadie la está mirando.

Finalmente, apaga el aire acondicionado si no es estrictamente necesario durante el verano y gradúalo a la temperatura adecuada.

Podemos decir lo mismo con la calefacción.

6. Crea un pequeño  jardín en tu patio o terraza

Puedes comenzar de manera sencilla, con plantas de fácil cuidado.

Una excelente forma de enseñarle a los niños el valor de los vegetales es cultivando lechugas, tomates, brócoli y cebollas.

Cuando recojas “la cosecha”, invita a tu hijo a preparar la comida con los vegetales recolectados.

7. Cierra las puertas

Un simple gesto, como cerrar la puerta cuando el aire acondicionado o la calefacción está encendida, puede reducir la huella de carbono de cada miembro del hogar.

Explícale en que consiste la huella de carbono.

Además, cuéntale a tu hijo sobre lo perjudicial que es dejar la puerta del refrigerador abierta por demasiado tiempo.

8. Enséñale a reciclar

Cuéntale a tu niño o niña sobre los peligros de crear basura en exceso.

Asigna un recipiente de reciclaje para cada tipo de material, bien sea papel, vidrio o plástico. La manera perfecta de complementar este hábito es comprando productos elaborados a partir de materiales reciclados.

Recicla el papel y enséñales a utilizar las dos caras del papel. Este hábito lo conservarán toda la vida. 

Habla a los niños de las 3R: Reducir, Reutilizar, Reciclar

9. Haz abono orgánico

Enseña a tus hijos qué alimentos sirven o no para hacer abono de jardín.

Para ello, crea el hábito de clasificar los desperdicios de la comida, como las cáscaras de plátano, por ejemplo.

 Muéstrales cómo ocurre el compostaje y déjales usar fertilizante natural cuando realicen el proceso de abonado de las plantas.

10. Usa el transporte público

Si acostumbras a ir con tus hijos en transporte público, lo verán como algo normal dentro de su forma de vida y ayudarás a tener ciudades menos contaminadas.

11. Organiza paseos en bicicleta o caminatas

Una buena forma de hacer que los niños comprendan el valor de los recursos naturales es enseñándoles que no todos los viajes deben hacerse en coche.

Salir a caminar en familia y utilizar la bici en el parque es una excelente opción en este sentido. De esta forma, cuando el niño crezca, desarrollará el hábito de ir a cualquier lugar caminando o en bicicleta.

Un consejo adicional es organizar excursiones a la montaña, a la playa o simplemente acampar en una región de mucha vegetación.

Conectar con la naturaleza, desde la naturaleza, siempre es la mejor opción para hacer que nuestros niños comprendan el valor del medioambiente.

12. Reduce el plástico de tu vida

El uso de bolsas de tela está cada vez más extendido. Hay que procurar reducir el uso de las bolsas de plástico, porque generan problemas medioambientales importantes.

Enseña a tus hijos a reciclarlos bien y a evitar su uso, dentro de lo posible.

13. Educa a tus hijos en el respeto por los animales y las plantas

Esa forma de respetar al entorno que nos rodea tiene un significado muy positivo, para concienciar a las nuevas generaciones del valor de lo que tenemos y que hay que conservar.

Visita viveros, granjas y parques naturales y haz que tus hijos e hijas dejen los lugares por los que pasan como los encontraron. 

14. Consumo responsable

Enseñarles a practicar desde pequeños un consumo responsable. Les va a servir para adquirir lo imprescindible y lo que se necesita para vivir, dando valor a lo que tienen y evitando un consumo innecesario.

El consumo responsable se basa en dos máximas, que son consumir menos y que lo que consumamos sea lo más sostenible y solidario posible.

El consumo responsable es imprescindible para conseguir un mundo mejor.

15. Hablar sobre el cuidado del medioambiente en casa.

Además de todos los puntos anteriores es muy importante hablar a los niños de la importancia de cuidar el medioambiente.

Desde pequeñitos tienen que saber que todo lo que hacen tiene una repercusión en el medioambiente, en el lugar donde viven y que hay que hacer todo lo posible por conservar esos lugares.

¡La Tierra es nuestro hogar y es de todos!

¡Cuidemos nuestro planeta y enseñemos a cuidarlo!

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