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¿Cuánta comida se desperdicia en el mundo?

Comiendo en un restaurante

Los desperdicios de alimentos representan uno de los problemas más grandes de nuestra sociedad en términos de impacto ambiental y seguramente alguna vez te has preguntado cuánta comida se desperdicia en el mundo.

En los últimos años el desperdicio de alimentos se ha convertido en un problema mundial que afecta las economías y contribuye directamente al calentamiento global.

Aunque es desconocido por muchos, el desperdicio de comida puede llegar a ser tan perjudicial como la contaminación del aire o la deforestación.

Si miramos para atrás

A lo largo de la historia los alimentos siempre fueron escasos.

Sembrar una hectárea de tierra requería de mucho trabajo y dedicación por lo que los alimentos cosechados eran consumidos o almacenados en su totalidad.

Por lo tanto, desperdiciar alimentos era impensable para la mayoría de los seres humanos.

Con la llegada de la revolución industrial fue posible sembrar mayores extensiones de terreno con menor esfuerzo, la producción de alimentos aumentó y el hambre, tan común en esas épocas, disminuyó en todo el mundo.

Lamentablemente, con este aumento de la producción comenzó el desperdicio de todo tipo de alimentos.  

Nos vamos al presente

La Organización de Naciones Unidas (ONU) asegura que 1 de cada 9 personas en el mundo no accede a la comida suficiente para tener una vida sana.

Además, el hambre es una causa de muerte que supera en decesos a la malaria, la tuberculosis y el sida.

Niño Indio. Hambre. Enfermedad
Niño en la India

Pero ¿Cómo es esto posible en un mundo donde una cantidad abrumadora de los alimentos producidos se desperdician?

El desperdicio de alimentos, más allá de ser antiético, también impacta negativamente a las industrias y genera graves consecuencias en nuestro entorno.

Pero si te preguntas:

  • ¿cuánta comida se desperdicia exactamente en el mundo?
  • ¿cuáles son las causas de esta pérdida?
  • ¿cuál es el verdadero impacto en el ecosistema terrestre?

Las respuestas las encontrarás a continuación.

Desperdicios de alimentos: las cifras oficiales

Hoy en día entre el 33 y el 50% de toda la comida producida en todo el mundo se desperdicia.

El valor de estos alimentos supera el billón de dólares.

Para ponerlo en perspectiva, en los Estados Unidos el desperdicio de comida representa el 1.3% del PIB total.

En el siguiente gráfico mostramos la cantidad de alimentos desperdiciados en España por cantidad total, sin elaborar y ya elaborados, una información que nos indica la cantidad de comida que tiramos sin llegar a utilizar.

Desperdicio de alimentos en España

¿Sorprendido? La verdad es que es preocupante.

¿A qué llamamos desperdicio de alimentos?

El desperdicio de alimentos no es otra cosa que:

«La acción de desechar artículos aptos para el consumo humano».

Este término es distinto a la pérdida de alimentos, que está estrechamente ligado a:

  • las primeras etapas de producción,
  • al almacenamiento y
  • al transporte a los lugares de destino.

¿Cuándo ocurre?

 Ocurre cuando los consumidores desechan los alimentos de forma intencionada, por mala planificación y/o caducidad de los mismos.

Casi un tercio de los alimentos producidos acaban en desperdicios cada año.

Unos 1300 millones de toneladas de alimentos anuales.

La ONU

Esta realidad genera costes financieros de 2,6 billones de dólares anuales, y los alimentos desperdiciados pueden alimentar hasta cuatro veces más a los 815 millones de seres humanos que sufren de hambre en el mundo.

Cifras oficiales

Una investigación reciente de la ONU reveló que más de 930 millones de toneladas de alimentos que se comercializaron en 2019 en tiendas, restaurantes y hogares, acabaron en la basura.

La organización asegura que esto representa el 17 por ciento de todos los alimentos producidos ese año.

Si tenemos en cuenta que la producción agrícola total en el mundo es de 6 mil millones de toneladas, estamos ante una situación alarmante.

El desperdicio de alimentos se genera principalmente en la cadena de suministro de este sector, especialmente en la producción agrícola, donde se genera un 33 por ciento del volumen total de desperdicios.

 Las etapas de procesamiento, distribución y consumo de estos alimentos generan juntas un 46 por ciento del total del volumen de desperdicios alimenticios.

Infografís del Desperdicio de Alimentos en el Mundo según la FAO
Enorme problema el desperdicio de alimentos, para el planeta y para la población que pasa hambre

¿Distribución deficiente o producción exagerada?

Mientras tanto, 800 millones de personas alrededor del mundo se acuestan con hambre, es decir, 1 de cada 9 personas en el planeta están en condición de hambre o desnutridas.

Irónicamente, todas estas personas se podían alimentarse lo suficiente con menos de una cuarta parte de los alimentos que se desperdician en los Estados Unidos, el Reino Unido y Europa cada año.

Es importante señalar que nuestro sistema actual de distribución de alimentos está totalmente globalizado.

La demanda de alimentos en los países desarrollados puede elevar el precio de los alimentos cultivados para la exportación en los países en desarrollo, lo que promueve el uso de los cultivos destinados a las poblaciones nativas para la exportación. 

Pero, el hambre no es solo un problema de los países en vías de desarrollo.

  • Durante el año 2019 en España, más de 1 millón de personas accedieron a alimentos provenientes del Banco de Alimentos.
  • En los Estados Unidos, 40 millones de estadounidenses viven en la pobreza alimentaria.

El impacto ambiental de los desperdicios de alimentos

El desperdicio de alimentos no solo afecta a los seres humanos, sino tambien al planeta, ya que el medio ambiente se ve muy perjudicado.

Los alimentos cultivados que se desperdician consumen energía fósil, agua, fertilizantes y todo tipo de recursos que pudieran ser utilizados más eficientemente.

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), los países desarrollados y los países en desarrollo generan un volumen similar de desechos de alimentos.

  • En el caso de los países con bajos ingresos, los desperdicios se producen durante las primeras etapas de producción.
  • Mientras tanto, en regiones como América del Norte y Oceanía, los consumidores desperdician el 61 por ciento de los alimentos.

Es muy importante tener en cuenta que:

Cuanto más volumen de desperdicios se produzca en la fase de consumo, el impacto ambiental será mayor, ya que en esta etapa se invierten muchos más recursos para procesarlos, transportarlos, almacenarlos, etc.

Esto incluye la emisión de gases de efecto invernadero y un mayor consumo eléctrico que en la etapa de producción.

De hecho, si los “desperdicios de alimentos” fuesen clasificados como un país, sería el tercer país más contaminante después de China y EE.UU.

Agua

Según datos facilitados por el Banco Mundial, el 70 por ciento del agua que se utiliza en todo el mundo se destina a la actividad agrícola.

Debido a esto, el desperdicio de alimentos tiene un alto impacto en la pérdida de agua dulce y recursos híbridos subterráneos.

Además:

Los alimentos que nunca se comen representan el 25% de todo el consumo de agua dulce a nivel mundial.

Banco Mundial

Solo para que nos hagamos una idea;

  • Si tiras un kilogramo de carne de ternera a la basura, estamos desperdiciando alrededor de 15.000 litros de agua que fueron utilizados para la producción de dicha carne.
  • Lo mismo ocurre con un vaso de leche: se usan 250 litros de agua para producir un vaso de leche.

Suelos

Nuestros suelos también se ven afectados por los desperdicios de comida.

Cerca de 1.400 millones de hectáreas de tierra se utilizan para producir alimentos que luego son desechados.

 Si a esto le sumamos las pérdidas de aceite vegetal, que se utilizan en el proceso industrial de su elaboración, el impacto a la biodiversidad generado por los monocultivos y el uso de ecosistemas silvestres como espacios agrícolas, la situación es alarmante.

Además, las tierras cultivadas han sido deforestadas, las especies nativas han sido desplazadas o llevadas a la extinción y los suelos han sido degradados, todo para producir comida que luego tiramos a la basura.

Finalmente, cuando los alimentos que desperdiciamos van al vertedero, que es donde termina la gran mayoría, se descomponen sin acceso al oxígeno creando metano, que es 23 veces más contaminante que el dióxido de carbono y que contribuye al calentamiento global, aunque la proporción existente en la atmósfera es mucho menor.

El metano se crea por la descomposición de la materia orgánica que procede en gran parte de los vertederos, el ganado bovino y el resto del sector ganadero (pollos y cerdos).

¿Cómo podemos reducir el desperdicio de alimentos?

La población mundial no se está reduciendo, está aumentando.

La ONU estima que, para 2050, la población pasará de 7.600 millones a 9.800 millones de personas.

Entre otras cosas, esto indica que la producción de alimentos también está en vías de aumentar y, con ello, los desperdicios.

En el caso de los países en desarrollo, es importante fomentar un nivel superior de capacitación a los productores agrícolas, además de aumentar las inversiones públicas y privadas en infraestructura para este sector.

Existen tecnologías de refrigeración alternativas y mejoradas que pueden contribuir a un cambio positivo.

Los supermercados y tiendas también pueden hacer su parte, al donar los alimentos no vendidos a organizaciones benéficas.

Food and Agriculture Organization of the United Nations

Francia prohíbe a los supermercados desechar los alimentos que no utilizan, y obliga a donarlos, siendo el primer país del mundo en aprobar una ley con la que pretende disminuir por lo menos un cuarto del desperdicio de comida en el país.

La ley obliga a los supermercados a donar la comida a bancos de alimentos u organizaciones de caridad para que la distribuyan entre las personas que lo necesitan.

Los gobiernos tienen un papel fundamental para fomentar el cambio.

Además de invertir más recursos en tecnologías verdes (biogás, bioplásticos, etc.), es crucial educar a las personas sobre la seguridad alimentaria y la planificación de sus comidas.

Para finalizar, ya sabemos que el desperdicio de comida en el mundo es un grave problema que tenemos que solucionar y nosotros, las personas de a pie formamos parte del problema y tenemos que cambiar nuestra actitud para ayudar a resolverlo.

En este artículo puedes ver los hábitos saludables que van a ayudar a conseguirlo.

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